Puede que Eva Longoria no esté pasando por el momento de más tipazo desde que la conocemos, que algo más redondeada que cuando era la pizpireta Gabrielle Solís sí que está, pero a pesar de todo cuando se embute en un vestido negro con brillis como este está espectacular.
Y ya no digamos si Eva se suelta el pelazo y se nos pone un palabra de honor rosa clarito. La foto no es que sea muy buena, pero os garantizo que era largo, y estilosísimo.
Pero es que claro, también mola tener un vestido verde de gasa con corte romano y moñazo otra vez. Mario López está ideal siempre, el pobre con el mismo smoking toda la noche.
Al entrar nuestra amiga Eva optó por un vestido rojo que combinaba cuero y encajes. Para mi gusto el peor de la noche, el que peor le sentaba y es más, le hacía hasta un cuerpo raruno… y el moño era pelín espantoso.
Pero es que también tenía otro vestido negro, no tan espectacular como el que lució en la gala. Lo mismo es el efecto óptico, pero esa mezcla negro sobre claro haciendo aguas no me termina de convencer tampoco. Eso sí, le sienta como un pincel.
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